El título de la película parecería una tomada de pelo a la vida de la protagonista, porque justamente la vida de Edith Piaf no fue precisamente 'color de rosa'.
El film nos muestra eso: la capacidad de volver a ponerse de pie de esta genial artista que mas allá de haber nacido y crecido en la miseria extrema, padecer perdidas desde muy temprana edad y tener una vida marcada por el dolor llega a convertirse en sinónimo de París para todo el mundo.
El director Olivier Dahan usa tres recursos que me gustaron particularmente: ir y volver en el tiempo a largo de toda la pelicula, primeros planos muy cerrados y fuertes contrastes de iluminación que aumentan el dramatismo en numerosas escenas.
Pero lo que le da una calidad singular, además de las canciones de la Piaf, son las actuaciones de la protagonista: Marion Cotillard, de las jóvenes actrices que hacen los papeles de Edith niña y del resto de los actores, componiendo personajes de gran credibilidad.
El título original en francés es La Môme, que quiere decir la niña, como se la conoció a Edith en sus primeras actuaciones antes de la guerra.
Más allá de algunas licencias que se toma el director para contar la historia, es una película que vale la pena ver. Para los que conocíamos algo de la Piaf, nos permite acercarnos un poco más a su historia, pero los que no saben nada de ella, igualmente se verán atrapados por esta artista que, como dijo su amigo Jean Cocteau, te entregaba el alma en su voz.
Dura 140 minutos y en general esta calificada para mayores de 13 años. No tiene escenas de sexo explícito ni de violencia física, pero sí muestra con gran crudeza las condiciones de extrema pobreza y de marginalidad.
Dura 140 minutos y en general esta calificada para mayores de 13 años. No tiene escenas de sexo explícito ni de violencia física, pero sí muestra con gran crudeza las condiciones de extrema pobreza y de marginalidad.
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